Radiadores que no calientan: ¿qué hacer para solucionarlo?

hace 5 meses

Cuando llega el frío y encendemos la calefacción, esperamos que nuestros radiadores funcionen correctamente y nos brinden el calor necesario para hacer frente a las bajas temperaturas. Sin embargo, en ocasiones nos encontramos con que algunos radiadores no calientan como deberían. Esto puede resultar especialmente frustrante, ya que nos impide disfrutar de un ambiente cálido y acogedor en nuestro hogar.

En este artículo, exploraremos las posibles causas por las cuales algunos radiadores no calientan correctamente y te proporcionaremos una serie de soluciones para solucionar este problema. Desde la purga de los radiadores hasta la revisión de la presión de la caldera y las válvulas de paso, te guiaremos paso a paso para que puedas resolver el problema y disfrutar de radiadores que funcionen correctamente.

Causas comunes de radiadores que no calientan

Existen varias causas que pueden explicar por qué algunos radiadores no calientan como deberían. A continuación, te presentamos algunas de las más comunes:

Aire en el sistema: Uno de los problemas más frecuentes es la acumulación de aire en el sistema de calefacción. Cuando hay aire en los radiadores, este puede bloquear el flujo del agua caliente y evitar que el radiador se caliente adecuadamente. La presencia de aire en el sistema puede ser resultado de una falta de purgado de los radiadores, una fuga en las tuberías o incluso un mal funcionamiento de la bomba de la caldera.
Llave de paso cerrada: Otra causa posible es que la llave de paso del radiador esté cerrada. Puede ser que se haya cerrado accidentalmente o que alguien haya manipulado la llave sin darse cuenta. En cualquier caso, si la llave de paso está cerrada, el agua caliente no podrá circular hacia el radiador y este no se calentará.
Falta de presión en la caldera: La presión de la caldera es fundamental para el funcionamiento adecuado del sistema de calefacción. Si la presión es demasiado baja, el agua no circulará correctamente y los radiadores no calentarán correctamente. Esto puede ser causado por una fuga en las tuberías o en la caldera, o por un mal ajuste de la presión en la propia caldera.
Llaves termostáticas defectuosas: Si tus radiadores están equipados con llaves termostáticas, es posible que estas estén defectuosas y no funcionen correctamente. Las llaves termostáticas regulan el flujo de agua caliente hacia el radiador en función de la temperatura ambiente. Si estas no funcionan correctamente, el radiador puede no calentar adecuadamente.

Cómo purgar los radiadores

Uno de los pasos más sencillos y efectivos para solucionar el problema de radiadores que no calientan es purgarlos. La acumulación de aire en el sistema impide que el agua caliente circule correctamente y llegue hasta los radiadores, lo que resulta en una calefacción insuficiente.

Purgar los radiadores es un proceso bastante sencillo que puedes realizar tú mismo. Solo necesitarás una llave de purga, que puedes encontrar en cualquier ferretería. Sigue estos pasos para purgar tus radiadores:

Apaga la caldera: Antes de purgar los radiadores, asegúrate de apagar la caldera y esperar a que se enfríe un poco. Esto evitará el riesgo de quemaduras.
Localiza la llave de purga: En cada radiador, encontrarás una pequeña llave de purga en la parte superior o en los laterales. Esta llave suele ser un tornillo o una válvula con una pequeña rueda. Si no estás seguro de dónde está la llave de purga, consulta el manual de tu caldera o busca instrucciones en línea.
Coloca un recipiente debajo de la llave de purga: Antes de abrir la llave de purga, coloca un recipiente debajo del radiador para recoger el agua que pueda salir. Esto evitará posibles derrames y daños en el suelo.
Abre la llave de purga: Con la ayuda de la llave de purga, gira con cuidado en sentido contrario a las agujas del reloj para abrir la llave. Escucharás un silbido o un sonido de aire que indica que el aire está saliendo del radiador.
Espera a que salga el agua: Sigue manteniendo la llave de purga abierta hasta que salga agua continua y sin burbujas. Esto significa que se ha eliminado todo el aire del radiador y el agua caliente puede circular libremente.
Cierra la llave de purga: Una vez que haya salido agua limpia y sin burbujas, cierra la llave de purga girando en sentido de las agujas del reloj. Asegúrate de no apretar demasiado la llave para evitar posibles daños.
Repite el proceso en todos los radiadores: Repite este proceso en todos los radiadores que no calientan correctamente. Es posible que algunos radiadores tengan más aire acumulado que otros, por lo que es importante purgar todos para asegurarte de eliminar completamente el aire del sistema.
Enciende la caldera: Una vez que hayas purgado todos los radiadores, enciende la caldera y deja que se caliente durante unos minutos. Comprueba si los radiadores ahora calientan correctamente. En la mayoría de los casos, este simple paso de purgado solucionará el problema de radiadores que no calientan.

Comprobar la presión de la caldera

Otra posible causa de radiadores que no calientan adecuadamente es la falta de presión en la caldera. La presión en la caldera es fundamental para el correcto funcionamiento del sistema de calefacción, ya que garantiza que el agua caliente circule adecuadamente por las tuberías y llegue hasta los radiadores.

Para comprobar la presión de la caldera, sigue estos pasos:

Apaga la caldera: Antes de comprobar la presión de la caldera, asegúrate de apagarla y esperar a que se enfríe un poco. Esto evitará el riesgo de quemaduras.
Localiza el manómetro de la caldera: El manómetro es el dispositivo que te indicará la presión de la caldera. Por lo general, se encuentra en el panel frontal de la caldera. Si no estás seguro de dónde está el manómetro, consulta el manual de tu caldera o busca instrucciones en línea.
Comprueba la presión: El manómetro tendrá una escala que indica los diferentes valores de presión. La presión debe estar dentro de un rango determinado, que dependerá del tipo de caldera que tengas. Consulta el manual de tu caldera para saber cuál es el rango de presión adecuado.
Ajusta la presión si es necesario: Si la presión está por debajo del rango adecuado, es posible que necesites ajustarla. Algunas calderas tienen una llave de llenado que te permitirá aumentar la presión. Consulta el manual de tu caldera para conocer el procedimiento de ajuste de la presión, ya que puede variar según el modelo.
Controla la presión regularmente: Es recomendable controlar la presión de la caldera regularmente para asegurarte de que se mantiene dentro del rango adecuado. Si la presión sigue bajando constantemente, es posible que haya una fuga en las tuberías o en la caldera y sea necesario llamar a un técnico para que lo solucione.

Revisar las válvulas o llaves de paso

Otra posible causa de radiadores que no calientan puede ser un mal funcionamiento de las válvulas o llaves de paso. Las válvulas o llaves de paso regulan el flujo de agua caliente hacia los radiadores y si no funcionan correctamente, pueden afectar el calentamiento de los mismos.

Para revisar las válvulas o llaves de paso, sigue estos pasos:

Verifica que las válvulas estén abiertas: Asegúrate de que todas las válvulas o llaves de paso de los radiadores estén completamente abiertas. Si alguna de ellas está cerrada o parcialmente cerrada, el agua caliente no podrá circular hacia el radiador y este no se calentará adecuadamente. Gira las válvulas o llaves de paso en sentido contrario a las agujas del reloj para abrirlas completamente.
Comprueba el funcionamiento de las válvulas termostáticas: Si tus radiadores tienen válvulas termostáticas, asegúrate de que estén funcionando correctamente. Estas válvulas regulan el flujo de agua caliente en función de la temperatura ambiente, por lo que es importante que estén en buen estado. Si sospechas que alguna válvula termostática está defectuosa, puedes intentar ajustarla o, en caso necesario, reemplazarla.
Verifica posibles obstrucciones en las válvulas: A veces, las válvulas o llaves de paso pueden obstruirse debido a la acumulación de suciedad. Si sospechas que una válvula está obstruida, puedes intentar limpiarla con un poco de agua caliente y un cepillo de cerdas suaves. Si la obstrucción persiste, es recomendable llamar a un técnico para que lo solucione.

Determinar si el problema afecta a un radiador o a todo el sistema

Es posible que el problema de los radiadores que no calientan se deba únicamente a un radiador individual o que afecte a todo el sistema de calefacción. Determinar si el problema afecta a un radiador o a todo el sistema puede ayudarte a identificar la causa y encontrar la solución adecuada.

Solicitar ayuda profesional para limpiar el radiador y sus tuberías

Si has seguido todos los pasos anteriores y tus radiadores aún no calientan correctamente, es posible que haya acumulación de suciedad en el radiador y en las tuberías. La presencia de suciedad puede obstruir el flujo de agua caliente y evitar que los radiadores se calienten adecuadamente.

En este caso, es recomendable solicitar ayuda profesional para limpiar el radiador y sus tuberías. Un técnico especializado podrá utilizar equipos y productos específicos para eliminar la suciedad y el óxido del sistema de calefacción, permitiendo que el agua caliente circule libremente y los radiadores calienten correctamente.

Además de limpiar el radiador y las tuberías, el técnico también puede revisar el estado de las válvulas y llaves de paso, ajustar el detentor y realizar cualquier otra reparación o mantenimiento necesario para garantizar el funcionamiento adecuado del sistema de calefacción.

Ajustar el detentor si es necesario

El detentor es un componente importante en el sistema de calefacción y su función es controlar el flujo de agua caliente hacia los radiadores. Si el detentor está mal regulado, puede afectar el calentamiento de los radiadores y provocar que algunos no calienten correctamente.

Para ajustar el detentor, sigue estos pasos:

Localiza el detentor: El detentor suele estar ubicado en la parte inferior del radiador y puede tener la forma de una válvula con una rueda o una palanca. Si no estás seguro de dónde está el detentor, consulta el manual de tu caldera o busca instrucciones en línea.
Gira el detentor: Con la ayuda de una llave adecuada, gira el detentor en sentido contrario a las agujas del reloj para aumentar el flujo de agua caliente hacia el radiador. Si notas que el radiador se calienta demasiado, puedes girar el detentor en sentido de las agujas del reloj para reducir el flujo.
Prueba el ajuste: Después de ajustar el detentor, espera unos minutos y comprueba si el radiador ahora calienta correctamente. Si es necesario, puedes realizar pequeños ajustes adicionales hasta obtener el nivel de calentamiento deseado.

Medidas de precaución para evitar radiadores que no calientan en el futuro

Una vez que hayas solucionado el problema de radiadores que no calientan, es importante tomar medidas de precaución para evitar que esto vuelva a suceder en el futuro. A continuación, te ofrecemos algunas recomendaciones para mantener tus radiadores en buen estado y evitar problemas de calentamiento:

Purga tus radiadores regularmente: Realiza la purga de los radiadores al menos una vez al año, especialmente antes de encender la calefacción en invierno. Esto eliminará el aire acumulado en el sistema y permitirá que el agua caliente circule correctamente.
Controla la presión de la caldera: Verifica regularmente la presión de la caldera para asegurarte de que se mantiene dentro del rango adecuado. Si la presión es demasiado baja, puedes ajustarla siguiendo las instrucciones del fabricante.
Revisa las válvulas y llaves de paso: Comprueba periódicamente que las válvulas y llaves de paso estén funcionando correctamente. Asegúrate de que estén completamente abiertas y libres de obstrucciones.
Limpia regularmente los radiadores: Mantén tus radiadores limpios de polvo y suciedad. Utiliza un paño suave y húmedo para eliminar el polvo de la superficie y evita el uso de productos químicos agresivos que puedan dañar el acabado de los radiadores.
Realiza un mantenimiento preventivo: Programa revisiones periódicas del sistema de calefacción con un técnico especializado. Un mantenimiento regular puede ayudar a detectar y solucionar problemas antes de que se conviertan en grandes inconvenientes.

Conclusión

Cuando algunos radiadores no calientan correctamente, puede haber varias causas detrás de este problema. Desde la presencia de aire en el sistema hasta un mal funcionamiento de las válvulas o llaves de paso, es importante tratar de identificar la causa y tomar las medidas necesarias para solucionarlo.

Purgar los radiadores, comprobar la presión de la caldera y revisar las válvulas o llaves de paso son acciones que puedes realizar tú mismo para solucionar el problema. Sin embargo, si el problema persiste, es recomendable solicitar ayuda profesional para limpiar el radiador y sus tuberías o ajustar el detentor. Además, es importante tomar medidas de precaución para evitar futuros problemas de radiadores que no calientan.